AGRADECIMIENTO DEL PUEBLO A DIOS Y APLAUSOS SINCEROS AL SERVICIO EPISCOPAL DE UN OBISPO SALIENTE.

 

                  

                       

AGRADECIMIENTO DEL PUEBLO A DIOS Y APLAUSOS SINCEROS AL SERVICIO EPISCOPAL DE UN OBISPO SALIENTE. MULTITUDINARIA MISA DE ACCIÓN DE GRACIAS POR LOS  12 AÑOS DE MINISTERIO DE MONS. JOSÉ IGNACIO MUNILLA EN LA CATEDRAL DE DONOSTIA-SAN SEBASTIÁN.

Donostia, San Sebastián 8.02.2022

Dos horas antes de comenzar la celebración litúrgica, grupos de fieles fueron situándose en el interior del templo, mientras varios sacerdotes atendían confesiones en las sedes penitenciales.

La catedral del Buen Pastor cubrió su aforo al completo en las naves y además cerca de 150 personas siguieron la Eucaristía desde el atrio. Un alto número de sacerdotes revestidos con las casullas, acompañados por un diácono permanente, seminaristas y monaguillos acompañaron al obispo saliente durante la concelebración.

La homilía de Mons. Munilla se inspiró en la que pronunciara tres días antes durante su habitual vigilia de oración con los jóvenes los primeros viernes de cada mes y propuso compartir “diez convicciones”, una especie de decálogo que resume su magisterio episcopal:  1º Sabiduría de la confianza (se refirió a su lema episcopal: “In Te confido”; 2º Vivir en gracia de Dios (recordaba el propósito de unos ejercicios espirituales) ; 3º “Velad y orad”: Solo una oración profunda y perseverante, integrada en la celebración fiel de los sacramentos, nos dará la gracia de la perseverancia final; 4º Necesidad del acompañamiento espiritual que ayuda sanar las heridas; 5º Fidelidad al depósito revelado, y recordó la actualidad del Catecismo de la Iglesia como un tesoro; 6º Comunión eclesial inequívoca recordando la necesidad de la obediencia  unidos al Papa para recorrer el camino sinodal y le recepción con los brazos abiertos al Obispo que le suceda en San Sebastián;7º. Los pobres y los enfermos nos evangelizan; 8º Existimos para evangelizar; 9º La familia: existimos porque hemos sido amados, y en ese momento agradeció al Señor haber vivido con su madre los años de su ministerio y despedirse de ella, “¡Ha sido un detallazo, Señor!”, exclamó emocionado; 10º. Sentido del humor “no es otra cosa que el sentido común bailando”, añadió, y explicaba: “una gran ayuda para relativizar en esta vida todo lo que no sea Dios mismo”. Los fieles que llenaban la nave del templo, entre los que se encontraban numerosos jóvenes, y el atrio, rompieron en un largo aplauso.

(Texto completo de la homilía: https://www.enticonfio.org/homilia/accion-de-gracias-y-despedida-de-la-diocesis-de-san-sebastian/)

 

Al final de la celebración tomó el micrófono Juan María Olaetxea, Vicario General de la Diócesis quien agradeció al obispo saliente su ministerio con unas palabras impregnadas de afecto sincero y sintetizando las aportaciones de Mons. Munilla en su episcopado durante 12 años de trabajo intenso y entregado: su disponibilidad para recibir a cualquier persona que quisiera hablar con él; su solicitud por el seminario y fomento de vocaciones  presbiterales; la revitalización de la pastoral juvenil impulsando las JMJ, vigilias mensuales de oración acogida de realidades como Emaús, Bartimeo, Hakuna; el cuidado de matrimonios y familias con el impulso del COF y los retiros de amor conyugal;   el comienzo de la Adoración Perpetua desde 2012 “que ha puesto al Señor presente en la Eucaristía en el centro de la Diócesis” comentaba el vicario; su solicitud por los pobres y marginados atendiéndolos también directamente, lo mismo que sus frecuentes encuentros y eucaristías  con los encarcelados internos de la prisión de Martutene; su fomento de centros especializados para recuperar a jóvenes toxicómanos;  su solicitud con los sacerdotes mayores y enfermos a los que visitaba frecuentemente; sus peregrinaciones a Lourdes acompañando a  los enfermos, o visitándolos en la misma Diócesis: sus acciones para fortalecer la unidad y comunión en la Diócesis por encima de las ideologías; su austeridad de vida  y fomento  de la buena administración del patrimonio diocesano así como la simplificación de estructuras diocesanas reduciendo el número de arciprestazgos; la llamada a establecerse en Gipuzkoa órdenes religiosas compuestas mayoritariamente por personas jóvenes: Carmelitas samaritanas, las MM Brígidas, las hermanas de María Stella Matutina, los  monjes de Verbum Spei; su sensibilización evangelizadora a través de los medios: Radio María, la televisión diocesana  Betania sostenida en su totalidad  por voluntarios, los artículos en diarios, redes sociales…

Juan María Olaetxea terminó sus palabras reiterando el agradecimiento a don José Ignacio y entregándole una talla de la Virgen de Arántzazu, patrona de la Diócesis.

Mons. Munilla se arrodilló para besarla y la mostró alzando los brazos a los fieles. Después la depositó en el altar y comentó que aquél regalo le había recordado el que Jesús hizo a san Juan desde la Cruz confiándole a la Virgen María: «habéis hecho como Jesús: aquí tienes a tu madre. Me voy a Alicante con 'ama' Arantzazu».

Los aplausos se sucedieron ininterrumpidamente durante todo el recorrido de la procesión a lo largo de las naves hasta la sacristía.

Durante la semana los ecos de esta despedida y agradecimiento multitudinario a la persona y ministerio del obispo saliente siguen apareciendo abundantes en la mayoría de los medios en papel y digitales, reconocimiento irrefutable a Mons. Munilla y a su aportación revitalizante a la iglesia local en su identidad católica y misión evangelizadora.

Vídeo de la celebración completa: 

https://www.youtube.com/watch?v=PWWZ39f_EDo

 

Informó: Rafael Hernández Urigüen. Redactos de Omnes Magazine en Donostia- San Sebastián

Imágenes: Delegación de MCS de la Diócesis